jueves, 8 de octubre de 2015

TTIP, un país sin pequeños ni medianos agricultores y ganaderos…

Hola a todos. Muchas veces sabéis que compartimos en este blog desde la vida de las cebollas y las acelgas hasta recetas y experiencias de la gente vinculada a este bonito proyecto.
Hoy, aun reconociendo lo árido del tema como consumidores conscientes en esta sociedad y socios y amigos de Huerta Molinillo daremos dos pinceladas sobre un acuerdo internacional que sobrevuela nuestras cabezas y que de imponerse traerá consecuencias para todos. 

Parece ser que las multinacionales dan un paso más y una vuelta de tuerca en esto de mandar y gobernanar el mundo y los intereses de la gente y la sociedad pasan a un 5º plano por decir algo: Nos referimos al  Acuerdo Transatlántico de Comercio e Inversiones (TTIP), todo un ataque a la soberanía de los pueblos y por lo que a nuestra huerta ser refiere démonos cuenta del modelo hacia el que apunta el futuro. Sinceramente yo quiero otro y seguramente vosotros también…
Escuchemos a Javier Guzmán, director de VSF Justicia Alimentaria Global:

“Por lo tanto lo que nos encontramos no es ante un tratado de comercio benéfico para los sectores productivos sino de una dramática conversión del actual sistema de agricultura y ganadería que finiquita la existencia del campesinado.
Esta conversión parte de un aumento del actual control oligopólico de las fases clave de la producción, transformación y distribución alimentaria que condiciona toda la cadena, lo que altera los precios que reciben las explotaciones agrarias y los rebaja cada vez más. Con unos costes productivos en crecimiento constante, las explotaciones familiares se encuentran atrapadas en unos márgenes comerciales cada vez menores y ello les empuja inexorablemente a un crecimiento e intensificación que intenta lograr su supervivencia gracias a la economía de escala.
Con el TTIP, este proceso se vería incrementado y acelerado, porque obviamente la situación creada es como pescar en un mar cerrado con cada vez menos peces y con embarcaciones cada vez mayores. No hay pescados para todas ellas y solamente algunas de ellas, cada vez mayores, sobrevivirán, el resto desaparece. Las que sobrevivan, cuando se miren en el espejo, se darán cuenta de que han mutado de explotación familiar a factoría y que su dependencia del agronegocio no solamente no ha disminuido sino que se ha hecho más fuerte, incrustándose en él de manera prácticamente orgánica.

Por tanto la ley será crece o muere. Intensifica o muere. Intégrate con nosotros o muere.

Ahora imagínense por un instante nuestro país sin pequeños ni medianos agricultores y ganaderos. Imagínense toda nuestra alimentación en manos de cuatro multinacionales. El coste de evitar esta pesadilla será mucho menor que salir de ella.”

Si esto es así y mucho nos tememos que por aquí vayan los tiros… nos apuntamos al NO AL TTPI.



Esta entrada es una colaboración de Luis Javier Sanz, miembro de Fundación Alter.

No hay comentarios:

Publicar un comentario